Cañón de DÉLIKA

Desnivel: 188 m.

Macizo: Sierra de Gibijo (Valle de Orduña)

Ruta: Délika (Orduña)

Distancia: 7.500 m (Ida y vuelta)
Apta para niños: Si.

El Cañón de Délika, es el cañón del río Nervión en sentido ascendente por senderos y atravesando el río en numerosas ocasiones hasta llegar a la base rocosa, desde donde se observa hacia lo más alto el mirador del nacimiento del Nervión y donde rompe el agua, con una caída de 270 metros. En los meses de lluvias forma una impresionante cascada, donde el agua llega al suelo vaporizada. 

El recorrido de este cañón se adentra en la misma garganta del valle a través de un sendero paralelo al río y que permite contemplar las especies que se refugian en las pareces rocosas, en particular colonias de rapaces.

Para acceder hasta allí hay que dirigirse al barrio de Délika, situado en la localidad de Orduña. Partiendo desde Bilbao llegamos hasta Orduña, y sin entrar en el pueblo seguimos hasta la rotonda que indica como acceder a Délika, perteneciente a Álava. Una vez allí, y tras pasar el viaducto del tren comenzamos a caminar junto a un bar-merendero conocido como "El infierno".

Es un sendero que se ensancha durante 1 km. hasta llegar a un puente de piedra. Desde el puente tenemos dos opciones, continuar por una orilla del río o por la otra indistintamente ya que ambas confluyen en un mismo camino.

En este punto, el camino se va alejando del río, pero después de llanear unos metros vuelve a descender y ya no se alejará del cauce hasta el final del cañón.

Según nos vamos adentrando en el interior del cañón, el sendero en muchas ocasiones cruza el cauce del río, aunque también se puede continuar a través de las piedras que forman el río. Para ello tiene que estar seco o con poca agua como en esta ocasión.

A tres kilómetros del inicio de la ruta llegamos al tramo final y observamos las grandes prominencias rocosas que se van aproximando a la base de la cascada. A partir de aquí es necesario recoger los bastones y hacer uso de las manos para llegar a la base, con unas vistas espectaculares y el mirador del nacimiento del Nervión sobre nuestras cabezas.

Sin duda, es una ruta muy interesante y apta también para los niños. Recomendable hacerla en época que no haya llovido recientemente ya que cuando hay mucho caudal es intransitable a pié.